lunes, 7 de septiembre de 2009

Espejito

Eres como yo,
porque ambicionas y te quejas,
porque sabes que aun no consigues lo que quieres,
y también porque aun no quieres algo exacto.
Pasan mis horas
y ellas son las que me maldicen acariciando al reloj,
demostrándome su lealtad hacia su única causa y razón,
pero mírame caminando,
reconóceme en las calles,
esa persona que va con paso firme a cualquier lugar,
quien se detiene ante un anuncio para robarse las imágenes;
esa persona eres tu.
Cuando te bajas del auto,
yo,
cuando me pongo a mirarte
¿Quién reconocería su vida,
lejos de la bolsa de carne que nos han dado para contenerla?
¿Ya te aburriste de ser un mensajero,una lata de atún?
Se te aparecerán muchas cosas que te gustan
pero siempre habrá cascara
y no siempre tendrás uñas para poder pelar.
En los espejos polvorientos el pasado aun se refleja
pero seria iluso pensar que te pertenece
son residuos de aquellos que no limpiaron sus esperanzas.
Detengámonos,
compremos unas hamburguesas
manchémonos con colesterol y sal de mesa,
que de aquí en adelante nos tendremos que separar.
Olvidaras todo por tu bien,
las búsquedas de las letras que no comunican,
las que son gradas hacia la superficie,
y las Rosas que se transforman en Juanas o Franciscas,
pero en el fondo son todas Rosas,
algunas más rojas, más espinosas o peligrosas
por perder un poco de cordura
alineandose hacia la imagen directa de su infinita belleza.
De ahora en adelante
te devuelvo tu sordera para que puedas trabajar.

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