domingo, 29 de mayo de 2022

Cartas del Monte Fuji - Para siempre

Querida Yusuke

Prometí quererte el día que nos casamos y para mí las promesas son para siempre. Cuando me dijeron que te ibas a poner mal, que las cosas no parecían favorables a futuro, pues me asusté mucho. Tú casi siempre has sido quien controla la casa, mi vida y la de los chicos. Nunca pude lidiar con esa responsabilidad a pesar de haber tenido un equipo de trabajo espectacular que me ayudo en tantos proyectos que ahora otra gente puede apreciar. He tenido una vida feliz contigo, gracias por mis hijos, por los perros que tuvimos, por preparme un café en el momento exacto sin que yo te lo tenga que pedir, por haber seguido besándome y tocándome a pesar que me puse viejo y mi piel cambio. Gracias también por respetarme y por gritarme cuando me lo he merecido. Ahora que Dios quiso que vayas a su lado yo no quiero romper mi promesa, nunca lo he hecho y he venido al hospital todos los días desde que te internaron. Hoy te traje una Bromelia para que te haga compañía pero ahora que te adelantaste prefiero que nos la haga a los dos. Ya arregle eso no te preocupes. Estoy emocionado porque voy a poder verte de nuevo cuando cruce. Te extraño mucho y no he podido soportar ni una día sin llorar, espero que ahora que lo sepas no te sientas culpable de nada. Ya los chicos son padres y nosotros abuelos, ya se saben cuidar solos y sabrán que hacer. Igual les he dejado un dinerito que estoy seguro es lo que te hubiese gustado que haga. Te veo pronto amor, espérame.

Tu esposo Aki