El Sapo

Escucho a las mujeres reir,
hablar de lo gordas que se ven,
veo sus caras atentas examinandose el culo mutuamente
para asi poder decidir quien de todas es la mas bella.
Tambien las escucho opinar de aquellas que no están,
decirse viejas o gordas,
contrarrestar la envidia que navega
de ida y vuelta en sus cabezas
y cuando hablan de los hombres,
del polvo de la útima noche
o de lo humedas que se ponen
cuando ven a aquel mozo que es identico al actor
se les oye tan sinceras
y tan abiertamente admiten que les gusta que las toquen
que les bajen las bragas mañana tarde y noche,
Que les den de alma
sino da igual si les amas o les engañas.

El Prestamista

Llegue tarde pero a nadie afecta,
mi rutina es tan pasiva
que no se nota cuando falto.
No tengo recompensas
apárte de mis clientes aliviados;
y no me gustaria que ellos me recordasen
como un hombre sin trabajo.
Ya casi pasa el año
y aun no aprendo mucho
sin embargo ya conozco muchas caras de lo extraño,
muchas formas de llanto
y la soledad que empuja hacia donde pocos han llegado.
Preparé mejor la fórmula de interrogar
y se cuando callar para que haya espacio
y quepan los recuerdos,
gracias Dr. gracias por todo,
es la mejor caricia para seguir vistiendo mi traje
Y usando mi camisa.



dedicado a Jessica

Fila

Si es que existe el limbo yo estoy dentro de él
y observo a la juventud amontonada
esperando el alimento de su pastor,
las lineas de luz que atraviezan cada espacio
que encuentran en las construcciones que me rodean
tiene un calor inquisidor
y mientras camino noto que a nadie parece importarle la inquietud del otro.
Cada cual en su cabeza
solo dejando espacio para el sexo.
¿Qué habrá dentro de un año?
el rebaño crecera y yo estare fuera de esto.
¿Quién me garantiza que la vida tomara sentido a medida que gaste más?
La precision con que la muerte nos gana la partida
me hace desear vivir cosas intensas.

La consecuencia

Ella sabe, ella llora.
Ella ama y no cobra.
El engaña, ella duda.
El lastima, ella sangra.
El muere, el otro nace.
El se pudre, aquel madura.
Ella alumbra, el fulmina.
Nos acostamos y Uds. recién salen,
Se emborrachan y acá trabajan.
Mientras eres niño me hacen abuelo
Y cuando aun todo te parece enorme
A mi me quedan horas de vida entonces.

Calor

En estos momentos quede con mis entrañas en un pacto,
Yo les daría lo que quisieran y ellas dejarían de arder en las mañanas
Las horas pasarán y yo dejaré caer
El alimento, el líquido, las sales.
Los minutos podrán ser cálidos
Sin llegar a quemar mi interior
Y los gritos que oiré de aquí en adelante no durará,
Porque aquí en lima el calor nunca es mucho.
Pronto me convertiré en una maquina devoradora
Y las cosas que me den alivio serán mi cicuta.
Tratare de sudar más para no convertirme en una mole inmunda,
Caminare de aquí a mi casa
Y correré en las noches los domingos.
La soledad es la que me impulsa A tratar de ver gente desconocida en circunstancias triviales.
Con suerte habrá una muestra de dios
En mujeres, accidentes, trifulcas, ira o amor
De paso lograre mantenerme mi salud
Sin privar a mis egoístas vísceras de las cosas que solicita
Mi mujer agradecerá mi fuerza
Y tendrá más probabilidad con mi semen saludable
De darme una razón para mantenerme en esta rutina
Que convierte mi tristeza en liquidez.

Radiografia

Despues de todo nada
y en la nada quedan restos,
colillas de cigarros que forman paredes pestilentes,
fotos borrosas que tienen dentro movimientos
y ropa sucia que decora los rincones con los cuellos negros.
Alan García proclama nuestro progreso económico
mientrás se asesinan muchos por dinero.
El pais despues de todo queda en nada
y su nada tiene restos.
Todos somos restos que ensuciamos la belleza del terreno,
menos las mujeres que se encuentran caminando
y las madres,
los profesores, los nativos, los caudillos,
Oscar Aviles, Cesar Cueto, Marco Aurelio
y si viviera, Sofocleto.

El Minero

Ahorita me siento mal

y no es la acidez de mi vientre,

ni el calor de mi sorpresiva ciudad.

Debe ser lo de siempre,

como me dijo un chica,

hacer lo que no quieres por el mineral

dejar lo que si quieres por la soledad,

la soledad mala que te hace ponerte limites

no la que te hace oir dentro.

Ayer, en los ojos que vi reconoci la trivialidad

y en su gran culo vi la unica posibilidad

que me brinda ese tipo de belleza

y las risas son tan lejanas para mi,
a pesar de haber estado rodeado de ellas.

Falta poco para comenzar mi rutina

y no podre tocar más mi quena

ni ver a mi esposa cuando toma su siesta.

Me siento triste y no es la tristeza normal,

es que estoy muriendo en realidad.

Desde hoy comenzó y nose cuanto durará,

no quiero irme aún sin escribirle una canción a Silvia

ni sentir que hago algo que disfruto

y estoy siendo feliz.

Estoy tranquilo a pesar,

ya el tiempo viene de regreso

y me preocupo.