Lo que se entrecruzo una vez
se volvió el inicio de un camino de caracol,
dentro de su concha quedaron los primeros rastros
de un posible lecho juntos
murmurando en el eco de los minutos
la propaganda amarillista de la muerte.
Mis hermanos apoyaron con tanto ahínco
la separación de mi niñez con las otras cosas de la vida
que de a pocos fui creyéndome
la sentencia de la sangre fría para mi casta.
Una vez que maduramos no existió ninguna relación
con las fotografías ni los recuerdos,
es solo un sueño tallado en un árbol
donde se puede ver un rastro
de lo que aconteció en nuestra imaginación.
Te espero siempre en el ayer de mi futuro
y en la humedad de este sendero
que refresca con cada centímetro
todos los bailes que tuvimos.
se volvió el inicio de un camino de caracol,
dentro de su concha quedaron los primeros rastros
de un posible lecho juntos
murmurando en el eco de los minutos
la propaganda amarillista de la muerte.
Mis hermanos apoyaron con tanto ahínco
la separación de mi niñez con las otras cosas de la vida
que de a pocos fui creyéndome
la sentencia de la sangre fría para mi casta.
Una vez que maduramos no existió ninguna relación
con las fotografías ni los recuerdos,
es solo un sueño tallado en un árbol
donde se puede ver un rastro
de lo que aconteció en nuestra imaginación.
Te espero siempre en el ayer de mi futuro
y en la humedad de este sendero
que refresca con cada centímetro
todos los bailes que tuvimos.
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